dilluns, 30 de novembre del 2009

Amor peligroso.

Nunca supe ver el mal que me hacía. Era un encanto peor que el de los abismos: peligroso, pero atractivo. Era como una droga, me mataba por dentro pero me mantenía tercamente atada. Aunque hubiera querido huir de ello, no habría podido. Colmaba su amenaza de palabras dulces; como quien te dice "Mi amor, no te haré daño" sosteniendo un cuchillo. No supe ver el arma, me perdía en la inmensidad del "mi amor".

Llenó mi cuerpo de caricias; mis vestidos, de flores; mis labios, de besos; mi lengua, de placeres; mi cabeza, de su ser; mi conciencia, de amor; mi sensatez, de estupidez; mi intuición, de cegueza. Todo mi mundo era suyo. Fue todo, fui nada; fui amor, fue odio.

Fui su llave, él mi candado. Fui su alma, él mi cuerpo. Fui su lecho de amor, él mi tumba. Fui sus besos, él mis mordiscos. Fui su tesoro, él mi dragón. Fui su prisionera, él mi caballero. Le di todo, él lo tomó. Le deseé, él me mató.


-"La gente no muere por fantasmas, cariño. La gente muere de estupidez"

dissabte, 28 de novembre del 2009

Hojas.

http://www.youtube.com/watch?v=sKc6vVRfCh0

Cae la hoja, meciéndose despacio. Que nunca llegó al suelo, que nunca descansó , pero nunca murió...

divendres, 27 de novembre del 2009

Inocencia.

-Hermanita, hice algo terrible. Siempre habría creído que yo era una buena chica, pero divertirme a costa de los demás me encanta. Siento un gran placer cuando daño a mis amigos, si es que puedo llamarles así. Me encanta cuando les veo llorar, pidiéndome que pare de hacerles daño. Pero eso no es nada comparado con el abismo que siento cuando me están haciendo daño a mí. Siento placer y a la vez rencor. Es un dolor infinito, un deseo lascivo. Siento que debo devolverles todo el daño que me están causando pero a la vez me encanta ese sentimiento de tristeza, agonía absoluta.
-Mi pequeña y dulce hermana. Mi inocencia personificada, mi dulce bombón... ya no eres una niña pequeña. ¿Cuántos años cumpliste? ¿14? Entonces pronto vas a casarte... Has crecido tan deprisa, la pureza que creí que no te abandonaría nunca ya lo hizo. Naciste con una estrella, créeme, no dejes que el deseo te consuma. Mírame, a tu hermana mayor, tu mayor obstáculo y a quien más admiras. He perdido todo tras el mismo deseo que ahora amenaza con comerte a ti. Voy a contarte algo, un secreto, una leyenda muy antigua, un deseo, un secreto, un tesoro. Guárdalo en tu corazón, recuérdalo siempre, porque el dolor ageno muchas veces previene del propio. Piensa en ello, hermanita mía, piensa en ello.

dilluns, 23 de novembre del 2009

No más.

-¿No habrá más "te quiero"?
-No, lo siento, todo eso ha acabado.
-Entonces, ¿No vendrás por las noches a arroparme y me darás un beso en la frente como si fuera una niña pequeña? ¿Perderé mi existencia, sabré quien soy aunque me dejes? ¿Voy a quedarme sola? ¿Ya no habrá todo ese amor, ese cariño, esas caricias y esos besos? ¿No vas a volver nunca a dedicarme un texto cariñoso y terminaro con un gesto dulce y amable?
-No, todo eso se quedó atrás. No va a volver, olvídate de ello.

Quien no quiere perder su belleza.

Te miras en el espejo, pintas tus labios y valoras tu imagen. ¿Para qué? Quieres ser esa rosa bella, floreciente, joven. Quieres ser ésa de los pétalos más rojos, el centro más amarillo, las hojas más brillantes, el tallo más fuerte, las espinas más punzantes. Quieres todos tus lados: el atractivo, el dulce, el que llama la atención, el fuerte, el peligroso. Te amas pero te odias, porque amaste esa imagen que tanto agradaba a los demás, pero odias el aspecto que tienes ahora. Quieres siempre más, continuamente buscando otra fuente que te proporcione diversión, adrenalina, que quite tu cansancio y te haga joven.

Te inspeccionas la cara: ojeras, patas de gallo, arrugas en las mejillas, los labios caídos, ojos hundidos, frente ceñuda. En fin: cara de cansancio. Estás cansada por todos los golpes que te ha dado la vida, por todas las veces que has perdido y te has vuelto a levantar para ganar. Pero, seamos sinceros, estás cansada porque has vivido demasiado. ¿Y qué te queda ahora? Si ya has perdido la belleza que consideras tan importante, ¿por qué no dedicarte más a los que te quieren?

Miras tu cuerpo: senos caídos, tripa cervecera, pellejo que sobra, piel arrugada. Hasta tu pelo, blanco canudo, te indica que esto ya es demasiado. Bien, veamos qué puedes hacer: te puedes teñir (es económico), te puedes operar quirúrgicamente (no es tan económico, pero por la belleza todo, ¿no?) y quizás si te vistes mejor (oh, siempre es una buena opción y un buen motivo para gastar mucho dinero)... Bueno, vale, mejor vamos a dejarlo.

Te das un último repaso en los labios, te quitas el borde de pintura que no debería manchar tu piel. Abres y cierras varias veces los párpados intentando saber si ese reflejo de ti es una mentira. Acéptalo, te has vuelto vieja.

dijous, 19 de novembre del 2009

Disparo.

-Me has decepcionado terriblemente.
-¿Cómo? ¿Yo... te he decepcionado?
-Nunca imaginé que serías capaz de hacer algo semejante.
-¿Algo? ¿Cómo qué?
-Sobran las palabras.

Efectivamente, pues fueron las últimas que escuché.

dimecres, 18 de novembre del 2009

Así es.

Acaricio a mi gato lentamente. Me tiene miedo: le infundo respeto. No quiero hacerle daño, sólo tenerle en posesión de mis deseos. Le paso la mano por su lomo y se estremece ante el contacto tan directo de ambas pieles. No me quiere, pero está demasiado atado a mí. Quiere irse, está nervioso, pero no puede moverse. Ha quedado hechizado por mi poder, por mi sugestión. Ya no se irá. Tiene miedo, mucho miedo. Huiría a la mínima oportunidad. Le paso la mano por la cabeza y él baja las orejas y cierra los ojos demostrando su temor. No va a irse, lo sé. Disfruto teniéndolo entre mis manos, haciéndole lo que quiera y que él tan solo sea capaz de gruñir un ronroneo apagado. Aprieta los ojos y mueve los musculos con inquietud, pero sigue bajo mi control. Ya no huirás, mi pequeño.

Acaricio tu pelo y noto cómo un escalofrío te recorre. Me tienes miedo: te infundo respeto. No quiero hacerte daño y eso es lo que más te une a mí. Saber que podría destrozarte y jugar contigo pero que sin embargo no quiero hacerlo, te ata más a mí. Me encanta tenerte en posesión de mis deseos. Te acaricio la espalda y vuelves a estremecerte ante el contacto tan directo de ambas personas. No me quieres, pero estás demasiado atado a mí. ¿Querrías irte? Estás muy nervioso, pero no puedes moverte. Has quedado hechizado por mi poder, mi sugestión. Ya no vas a irte. Te acaricio la cabeza y cierras los ojos, en mezcla de temor y placer. Así que ya no huirás... Disfruto teniéndote entre mis manos, haciéndote lo que quiero y que tú tan sólo puedas enamorarte cada vez más de mí. Aprietas los ojos y te mueves con nerviosismo, pero sigues bajo mi control. Vaya pequeño, ya no vas a irte...

dimecres, 11 de novembre del 2009

Pensamientos mojados.

Paso largas horas bajo la lluvia pensando en que quizás esta no soy yo. Pensando en que quizás mi alma está encerrada en un cuerpo equivocado, que hay otra chica con mi aspecto. Estoy largas horas bajo el agua humedeciendo mi piel, marcando mis curvas, erizándome el vello de los brazos. Cierro los ojos, intentando buscar a esa otra persona con mi cuerpo y mi alma vuela, fuera de esta prisión equivocada. Pienso en si quizás tú la amarás a ella, a esa otra. Esa chica que no te merece, esa humana que es una impostora. Imagino si serás feliz, si te veré sonreír, si vivirás en su vida y llegarías a vivir en la mía. Un escalofrío recorre lentamente mi espalda, desde la nuca hasta la zona lumbar. Me estremezco, aprieto los párpados con más fuerza y muevo mis labios sin articular palabra.

Me siento en el suelo, manteniendo tu imagen en mi mente. Pienso muy lejos de esta multitud tan extraña. Rodeada de gente, tan pocas personas. Veo tantos rostros a diario, oigo tantas palabras y siento tantas caricias sobre mi piel. Tan sólo quiero oírte a ti. Imagino tus labios, besándome sólo a mí; tu boca, habándome sólo a mí; tus manos, tocándome sólo a mí; tus oídos, escuchándome sólo a mí; tu vida, existiendo sólo para mí. Me tumbo sobre la mullida hierba y el suelo empapado.

De nuevo, como cada vez, las mentiras que mi mente me muestra han vuelto a tirarme al suelo.

Demasiado en mi mundo.

Demasiadas veces paso pensando en m propio mundo, sin ver a mi alrededor como parte fundamental de mi vida. Siempre estando en un mismo espacio, pensando en mis cosas, moviéndome en mis calles, amando a mis sentimientos. Siempre en un único lugar, alejado de la gente. Pocas veces doy a conocerme, muestro mi rostro y me quito la máscara. Saber quién soy nunca fue mi obligación. Tan solo quiero estar aquí, una vez más, descansando sobre tu regazo, soñando en mi mundo.

Los demás creen que soy ausente, poco receptiva y menos cariñosa. Yo creo que ellos son demasiado curiosos, insoportables e idiotas. ¿Tienes que decir te quiero para saber que amas? Nunca es suficiente, no en el mundo de los demás. Yo vivo en el mío, en mi propio mundo. A veces demasiado distante, demasiado en mí, demasiado sin los demás. Vivo siendo egoísta y no me arepiento de ello. Nadie más merece estar conmigo, tan sólo tú, quizás, mi único lector. O puede que ni yo misma debiera estar en este mundo al que llamo "mío".

dimarts, 10 de novembre del 2009

...

Nunca había estado tan pendiente de alguien como lo estoy de ti. Miro constantemente a ver si te diviso entre el espectro de personas. Busco tu rostro entre tantos conocidos, intentando hallarte entre una multitud muy alejada de mí. Aunque me sienta sola y piense en ti, aunque mi dolor no se alivie como dicen las películas, te quiero.

Miraba los verdes campos como si pudieran ofrecerme respuestas a tantas preguntas. Siempre buscando, en constante movimiento, el porqué de la existencia. ¿Por qué tanta filosofía? Lo único que anhelo de ti es ese último beso... Siempre con la consciencia de que no eres mío, que no me perteneces ni debes hacerlo. Siempre pensando en el último adiós para poder saludar de nuevo. Siempre buscándote, queriéndote, deseándote.

Con un solo suspiro vienes y vas. Tan solo quiero que te quedes aquí, una vez más...

dilluns, 9 de novembre del 2009

Creí que no serías capaz de mirarme a los ojos y verme como una persona. Pensé que tu corazón estaba ya tan podrido que serías incapaz de ver que yo tenía uno. Creía y sigo pensando que no eres capaz de mirar al cielo sin sospesar su valor. Puto usurero. ¿Te crees que por atesorar dinero comprarás mil almas y mi felicidad? Eres un cerdo

Egoísmo, hipocresía, infidelidad y obsesión. Tengo mil palabras palabras para describirte, pero siento que ninguna será suficiente. ¡Puta sociedad! Has muerto en sus manos: consumido por el propio consumismo. ¿Aún puedes pensar o crees que voy demasiado rápido? No siento pena por ti, tampoco lástima; sólo lo puedo definir como ASCO. Cuando llores como un crío por todo el dinero que has perdido, ¿quién va a estar allí? Si piensas que estaré, comotes un gran error. ¡Para mí eres basura, quizás algo peor!

La rabia e smi pan de cada día y el odio, mi analgésico ¿Ves cabrón lo que sufro por tu culpa? Quiero ver tu sangre derramarse sobre el suelo. Quiero llenar una bañera y limpiarme con tus vísceras. Qué bajo has caído pensando que tendrías mi compasión. ¡Te deseo lo peor!

¿Queda acaso algún humano a mi alrededor? Siendo odio, siento rabia, impotencia y dolor.. pero también puedo sentir amor. No soporto a mi raza y aún menos a sus individuales, ¿por qué os busco entonces? Quizás encuentre a otra persona como tú: que me quiera y me ame, me cuide y me necesite. Sólo espero que si por encontrarla tengo que pagar un precio tan elevado como lo pagué por ti, me quede sola todo este tiempo.

No sabes cómo es mi vida: UN PUTO INFIERNO. Tengo miedo, me siento sola y acechada por la tristeza. ¿Me has visto llorando desesperadamente durante las noches? ¿¡Has sentido mi rabia negándome la respiración!? Ojalá te sientas mucho peor porque lo que aguanto cada día es por tu culpa. Te odio: a ti y a nuestra puta sociedad. Tan solo lamento haberte pedido perdón. Antaño fui buena y estúpida pero no me volverás a ver así. Comienza a rezar, que Dios se apiade de ti ya que yo no voy a hacerlo. Tomo un cuchillo y comienzo a andar. ¿Podrás escapar?


¡COMIENZA EL JUEGO!

dimarts, 3 de novembre del 2009

Lo siento


La tristeza es infinita, la impotencia, tangible. Es triste amar y no ser amado, pero más triste es amar y ser despreciado. Nunca te pedí tiempo, dedicación, amor o cariño.. pedí tu amistad. Quizás quise demasiado, demasiada amistad, demasiada confianza. Lo siento, ¿me oyes? ¡Lo siento! ¡Quizás me equivoqué pero todos somos humanos! Ni te llegas a imaginar la desolación que siento sin ti o contigo, porque por mucho que los demás me afirmen que estás junto a mí, te fuíste y no volviste. ¿Olvidarte? Imposible. ¿Odiarte? Inconcebible. Entiende que tienes mi amor, aun queriéndote aun odiándote, incondicional. Jamás me iré, jamás me marcharé. No.

diumenge, 1 de novembre del 2009

Efímero.

Me siento sobre ti, realmente, porque quiero acaparar tu atención. Te escucho hablarme, tu dulce voz derrite mis sentidos. Te miro como si no hubiera otra persona en este mundo que pudiera acompañarme en mi triste soledad. Me centro únicamente en ti, en tus ojos, tus labios, tus manos. No veo otro mundo que el que pudiera crear contigo. Te quiero, lo sé, pero no sé cómo conseguirte. Me siento perdida, muchas veces, confundida por la nube del dolor. No sé qué hacer y, ahora que te tengo delante, he perdido el mundo de vista. ¿Dónde estoy? Contigo... es lo único que quiero saber ahora.

Jugueteas con mis pulseras y el solo roce, tan mínimo y efímero, de tu piel me causa un cosquilleo en el estómago. Te muerdes las uñas, voy a quitarte la mano de la boca y rozo tus labios con los dedos. La suave piel que quisiera tener sobre la mía. Los labios a los que querría besar, los que querría poseer, saborear... Te tomo la mano y no te suelto, quisiera que nunca te apartaras de mí. Te acercas a mí, me sonríes, me derrites.. Acercas tu boca a mi oreja, lentamente, en voz baja y cálida, me susurras: te quiero... ; pierdo el sentido y me vengo abajo. De pronto la habitación queda oscura, fría y vacía. No reconozco el lugar donde estoy, pero puedo suponerlo: es mi habitación, de noche, sin nadie que me acompañe. Tú no estás aquí conmigo, todo ha sido un sueño. Producto de mi imaginación... Vuelvo a estar sola y perdida en mi triste camino... Todo fue tan efímero, pero tan feliz.