dimecres, 21 d’octubre del 2009

Paciencia

He guardado los recuerdos más remotos para ti. Has sido la luz de mis ojos, el calor de mi corazón, el frío de mis inviernos, las hojas caídas de mis otoños. Has sido todo lo que he querido que fueras, he sido todo lo que querías que fuera. Mi vida, tu vida, eran una sola, no había diferencias entre ambas. El amor comenzó cuando lo tuyo y lo mío se convirtió en lo "nuestro". La relación duró tanto, que la costumbre se convirtió en rutina, en el día a día, que se convirtió en la continuidad, la única opción. No recordaba otra forma de vida, otra manera de ver las cosas. La perspectiva no existía en "nuestro" mundo. Creía que todo esto jamás acabaría, pero las creencias no fueron la realidad. Todo acabó.

Tuve paciencia de aguantar malas palabras y miradas de desprecio. Me quedé como un perrito abandonado, sin saber buscar mi amo. Las calles eran todas iguales, sin salidas, sin camino. El mundo era gris, la alegría y la felicidad quedaron atrás. Por más que me preguntara "¿por qué?" la respuesta nunca llegó. Por más que te mirara, te rogara y te llorara, tu cara siempre era de indiferencia y frialdad. ¿Cómo debí de sentirme en ese momento, sin nada a lo que agarrarme? Nunca comprenderás, ni espero que llegues a hacerlo, la paciencia que tuve para aguantar eso. Las malas palabras, las amenazas y la soledad, todo eso, dejó huella en mí.

Ahora me ves , escritora de locuras y lectora de mundos diferentes. No parezco la misma, he crecido. No soy una niña pequeña y asustada, sino una mujer adulta y preparado. Todo lo que pasó, "todo lo que pasó" , las preguntas sin respuesta, me han cambiado. ¿Ves algo a simple vista? Te lo diré claramente: Soy tu peor pesadilla, el mal personificado, y vengo para hacerte sufrir.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada