divendres, 30 d’octubre del 2009

Murmurando.

Siento tu cuerpo sobre el mío, el roce de la piel cálida y tierna. Los movimientos suaves y curvilíneos, acompañados del sonido de tu dulce voz. Noto el tiempo pasar lentamente, fluyendo entre la poca distancia que hay entre ambos. Los minutos se alargan, evitando cruzar demasiado rápido nuestra forntera. Acarician mi cuerpo, suavemente, como una mano. La habitación está oscura, en silencio, sumida a nuestra magia. La temperatura es alta, natural, agradable. Mis sentidos se posan en tu boca, en tu cuerpo, en tu voz, en tus manos... Mis ojos están cerrados, imaginando corrientes de sensaciones provocadas por ti.

Me acaricias como si fuera el último gesto de ambas vidas. Me besas como si no hubiera más momentos en el mundo. Noto tu piel alrededor de la mía, abrazándome. Tus células besando las mías, tu mente pensando en mí. Te recorro ocupándome tan solo de ti, sólo estando contigo. Te amo como nunca te he amado... me gustas como nunca me has gustado. El cariño fluye a través de la habitación, chocando contra los segundos que avanzan un poco más deprisa.

Te acercas a mi oreja y me murmuras: "Te quiero" , y un éxtasis se apodera de mí.

1 comentari: